A la hora de elegir una luz frontal para la bicicleta, se puede optar por el típico foco con batería integrada y una potencia lumínica específica, o se puede ir un paso más allá y elegir un sistema modular que permita actualizaciones futuras así como otras ventajas añadidas. Esto es lo que propone la firma Knog con su ecosistema de dispositivos PWR, que no son otra cosa que una variada gama de luces y baterías compatibles entre sí para que el usuario decida qué potencia y autonomía necesita sin necesidad de limitar su elección a un modelo en concreto.
La gama Knog PWR se compone de tres baterías con capacidades distintas, y de tres ópticas modulares también diferenciadas por uso y potencia lumínica, en todos los casos compatibles y combinables entre sí. Las baterías modulares ofrecen la posibilidad de cargar cualquier dispositivo vía USB, doblando así su funcionalidad. La colección se completa con dos luces más, en este caso con una batería integrada que aunque no es modular, mantiene la función de cargar cualquier otro dispositivo mediante una salida USB dedicada.
Los focos modulares Knog PWR llegan al mercado en tres versiones: PWR Road, con 600 lúmenes de potencia; PWR Trail, con 1.000 lúmenes de potencia; y PWR Mountain, con una potencia de 1.850 lúmenes. En lo que respecta a las baterías PWR Bank compatibles con los focos, están disponibles en tamaño pequeño (3.350mAh); mediano (5.000mAh); y grande (10.000mAh). La autonomía de las luces viene dada por el tipo de batería elegida, situándose en un rango de entre 1 y 20 horas según sea el modo de potencia lumínica utilizado y la capacidad de la batería empleada.
Para los usuarios que prefieren una luz más tradicional, la gama PWR de Knog incluye el foco PWR Commuter, con una potencia máxima de 450 lúmenes y una batería integrada de 850mAh; o el PWR Rider, con la misma potencia pero con una batería integrada de 2.200mAh. Tanto los focos modulares como los de batería integrada incluyen la posibilidad de ser programados mediante una aplicación específica para personalizar los patrones de flash de las luces o la potencia de salida de los modos de luz fija.
El precio de la gama Knog PWR se queda en 54,95€ para el modelo PWR Commuter; en 64,95 para el PWR Rider; en 34,95€ para el foco modular PWR Road; en 49,95€ para el foco modular PWR Trail y la batería modular de 3.350mAh; y en 59,95€ para la batería modular de 5.000mAh. Tanto el foco PWR Mountain de 1.850 lúmenes como la batería modular de 10.000mAh serán lanzadas en breve con un precio todavía por anunciar, incluyendo además otros accesorios modulares como una lámpara de camping, un foco frontal de cabeza o incluso un altavoz, también compatibles con las baterías PWR Bank.
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