Si pensamos que los temibles radares de velocidad sólo están presentes en las carreteras y van dirigidos a los vehículos a motor, mucho nos tememos que estamos completamente equivocados. Jeremy Vine, presentador de la cadena de televisión inglesa BBC, vivió recientemente una situación completamente surrealista: mientras circulaba con su bicicleta por un carril bici londinense, fue amonestado por un agente de tráfico que, radar en mano, le informó que circulaba con exceso de velocidad.
Los hechos sucedieron hace apenas unos días cuando el presentador de la cadena inglesa se dirigía a las oficinas en su bicicleta. En un carril bici del Hyde Park de Londres, Jeremy fue parado por un agente de tráfico (¿de bicis?) que, radar en mano, le avisó de que circulaba a 25 km/h cuando la velocidad permitida en dicho tramo no podía superar los 10 km/h. Ante tal hilarante situación, Jeremy pidió disculpas al agente y, abochornado, consiguió llegar a los estudios de televisión para contar lo de su vertiginoso exceso de velocidad. "Es que vives al límite", le comentó irónicamente el productor de la cadena.
Esta noticia no dejaría de ser anecdótica si NO consideramos que los ciclistas ayudan a mejorar el medio ambiente, a disminuir el tráfico en las ciudades y a promover la salud. Pero considerando estos hechos, resulta realmente frustrante comprobar que los gobiernos, ya sea en el Reino Unido, en España o en Singapur, se preocupan más por obtener beneficios a base de recaudaciones de este tipo que por promover un desarrollo sostenible donde el uso de las bicicletas juegue un papel fundamental.
De una manera o de otra, algún que otro político en España podría hacer uso de un atisbo de inteligencia y promover la creación de una auténtica y práctica red viaria de carriles bici por toda la geografía española, aunque sólo sea con la 'sana' intención de recaudar dinero. Con las infraestructuras ciclistas ya creadas, quizá podríamos ser multados de forma un tanto ilógica, pero estamos seguros de que pagaríamos encantados dicha sanción.
En Twitter | Jeremy Vine
