El Campeonato del Mundo de Mountain Bike UCI 2017 se ha despedido del calendario en Cairns (Australia) con la disputa de los cuatro títulos pendientes de la modalidad de DHI. Un circuito de 1.9 kilómetros atravesando la selva tropical del Smithfield Park ha sido escenario de las emocionantes finales de Descenso, con victoria en la máxima categoría para Miranda Miller en féminas y para Loïc Bruni en hombres.
En la carrera femenina, la defensora del maillot arcoíris, Rachel Atherton, sufrió una caída en las rondas de entrenamiento, con fractura de clavícula y despedida del campeonato como resultado. Con la campeona fuera de juego, todos las apuestas se centraron en las corredoras Tahnée Seagrave, Myriam Nicole y Tracey Hannah, y aunque no realizaron una mala carrera, no fueron capaces de rebajar el tiempo marcado por la canadiense Miranda Miller, la nueva campeona del mundo de la disciplina. La medalla de plata fue Myriam Nicole y la de bronce, para Tracey Hannah.
En lo que respecta a la carrera masculina, el francés Loïc Bruni marcó el mejor tiempo de la carrera sin que ninguno de los grandes favoritos fuera capaz de rebajar la marca: "Es un gran alivio. El año pasado rompí la rueda en los Campeonatos del Mundo y no pude hacer nada, y este año he perdido algunas carreras así que tampoco estaba muy ilusionado. Conseguir ganar esta última carrera es lo más importante que podría haber hecho este año, así que ahora ya me quedo satisfecho con el año en curso".
El defensor del maillot arcoíris, Aaron Gwin, fue el único de los grandes favoritos capaz de acercarse al tiempo marcado por Bruni, logrando finalmente la medalla de bronce. La medalla de plata fue para el australiano Michael Hannah, conocedor como pocos del circuito disputado en su propia tierra. En las categorías de promoción, Melanie Chappaz en féminas y Matt Walker en hombres fueron los dos corredores Junior convertidos en campeones del mundo hasta que les toque defender título el año próximo.
