Se avecinan malos tiempos para los organizadores de las múltiples pruebas ciclistas, tanto de carretera como de montaña, previstas para 2017. ¿Por qué? Por la reciente cancelación de la Madrid Extrema 2017 en todas sus modalidades y por el aplazamiento de las inscripciones de la Vuelta a Ibiza BTT, ambas a consecuencia de un nuevo frente común: el de limitar la participación de las pruebas organizadas en España a un máximo de 450 personas (según prueba y recorrido) según las últimas normas del Ministerio de Medio Ambiente de España y sus respectivas Consejerías.
Para los que no lo sepan, la Madrid Extrema consiste en diferentes pruebas, tanto cicloturistas como de Mountain Bike, disputadas en territorio madrileño. La Vuelta a Ibiza BTT también forma parte de una serie de pruebas (carretera, BTT, Trail) desarrolladas en la isla balear que le da nombre. En ambos casos, las últimas ediciones de las pruebas congregaron a más de un millar de participantes; todo un éxito a nivel participativo pero un gran problema para los organizadores de los eventos.
A la hora de organizar una prueba deportiva, uno de los aspectos más importantes de la misma es determinar el impacto medioambiental a través de un minucioso estudio que, por supuesto, está supeditado a la aprobación por parte de la Consejería de Medio Ambiente pertinente. Una de las tareas del Ministerio de Medio Ambiente es velar por la preservación y buen uso de los espacios naturales presentes en la geografía española, y aunque se trata de un trabajo muy loable, lo cierto es que todo indica que dicha preservación y conservación pasa por comenzar a limitar y prohibir a diestro y siniestro.
Ante las grandes dificultades para sacar adelante la organización de la Madrid Extrema, su director, vencido por la presión burocrática y los 450 participantes máximos que le han permitido para las ediciones de 2017, ha decidido cancelar las pruebas previstas y devolver el dinero de las inscripciones a los usuarios. En el caso de la Vuelta a Ibiza BTT 2017 el problema se plantea similar. Un máximo de 300 participantes son las condiciones impuestas por Medio Ambiente, atendiendo que "es la máxima capacidad que pueden asimilar los espacios por los que pasan los ciclistas por motivos de erosión del territorio". Por el momento, las inscripciones de la Vuelta a Ibiza BTT han sido aplazadas, a la espera de un acuerdo... o de la cancelación de la prueba.
