Garmin ha presentado los nuevos Edge 550 y Edge 850, dos ciclocomputadores que destacan por su diseño compacto, su pantalla de 2,7 pulgadas de gran nitidez y una amplia gama de funciones destinadas a mejorar tanto el entrenamiento como la experiencia en ruta. Con ellos, la marca refuerza su posición como uno de los referentes en dispositivos de navegación y rendimiento para ciclistas.
Dos modelos para entrenar mejor y rodar con mayor seguridad
El Edge 550 se sitúa como una opción avanzada y ligera, mientras que el Edge 850 añade un conjunto extra de prestaciones que lo convierten en el modelo más completo de la gama. Ambos comparten una autonomía de hasta 36 horas en modo ahorro de energía y 12 horas en uso intensivo, cifras más que suficientes para acompañar al ciclista en sus salidas más exigentes.
Entre sus principales novedades destaca la integración de planes de entrenamiento adaptativos mediante Garmin Cycling Coach, que ajustan la carga de trabajo en función de la recuperación y las características de cada recorrido. Esta herramienta permite una preparación más precisa antes de una carrera o un reto personal.
Los dos modelos también incorporan alertas de nutrición inteligente, que ofrecen recordatorios personalizados de hidratación y alimentación teniendo en cuenta factores como el esfuerzo realizado, la temperatura o la humedad. Además, las actualizaciones meteorológicas en tiempo real, con información de viento y radar, ayudan a tomar decisiones más seguras durante la ruta.
Garmin ha mejorado las funciones de GroupRide, permitiendo comparar datos como velocidad, cadencia o potencia con los del resto del grupo en tiempo real. Tras cada salida, el nuevo análisis de relación de transmisión ofrece detalles sobre el uso de cada marcha cuando el dispositivo se vincula con cambios electrónicos, una información muy útil para ciclistas de carretera y montaña.
El Edge 850 añade extras de gran valor, como un altavoz integrado que actúa como timbre digital y permite recibir indicaciones de navegación o avisos de entrenamiento de forma audible. También incluye pantalla táctil además de botones, pagos sin contacto con Garmin Pay y la posibilidad de crear recorridos directamente desde el dispositivo.
En lo referente a la seguridad, ambos modelos incluyen detección de incidentes, LiveTrack para compartir la ubicación en directo y compatibilidad con la gama Garmin Varia, que permite recibir alertas de tráfico o controlar la iluminación y las cámaras desde la propia pantalla del ciclocomputador. Los usuarios también pueden colaborar en la comunidad notificando peligros en la carretera.
El precio de lanzamiento en España se ha fijado en 449,99 € para el Edge 550 y 549,99 € para el Edge 850, unas cifras bastante competitivas teniendo en cuenta el nivel de prestaciones que incorporan. Con esta nueva generación, Garmin ofrece a los ciclistas un compañero versátil, seguro y preparado para todo tipo de salidas, desde entrenamientos específicos hasta largas rutas de aventura.