Un ciclista de El Pinell de Brai, un municipio de la provincia catalana de Tarragona, resultó herido de gravedad el sábado 10 de marzo cuando, al circular con su bicicleta por un camino forestal del término municipal de Miravet, fue atacado salvajemente por los cinco perros de presa de un cazador que, tras observar lo sucedido y llamar a los animales, se marchó del lugar de los hechos sin prestar ayuda alguna a la víctima.
Según han informado los Mossos d'Esquadra, el ciclista sufrió heridas de carácter grave en las extremidades y la espalda además de una importante pérdida de sangre. El propietario de los perros, un cazador que escopeta en ristre merodeaba por la zona, se limitó a llamar a los animales tocando el cuerno de caza para hacerlos retroceder y, posteriormente, marcharse del lugar sin prestar auxilio a la víctima del ataque, argumentando que "no creía que el ciclista hubiera sufrido heridas graves".
Fue el propio accidentado el que tuvo que ponerse en contacto con su hermano que, debido al desconocimiento de la localización exacta de la víctima, tardó cerca de una hora en llegar hasta el lugar de los hechos encontrando al ciclista malherido en un charco de sangre. El hombre, de 41 años de edad, fue ingresado en el Hospital Comarcal de Mora de Ebro, donde ya se ha sometido a dos operaciones quirúrgicas para reparar las graves heridas provocadas por el ataque de los canes.
La policía autonómica de Cataluña investiga por los delitos de lesiones y omisión de socorro al dueño de los perros que, según se ha confirmado, ya cuenta con un historial de hechos similares a pesar de tener sus animales debidamente registrados en el Ayuntamiento e identificados con un chip. El cazador ha alegado en su defensa que, de haberse acercado al ciclista para ayudarlo, los perros se habrían ensañado más todavía, y que por eso decidió marcharse tan alegremente.
