Un rápido vistazo a Amazon basta para encontrar un fenómeno cada vez más extendido en el sector ciclista: una avalancha de marcas desconocidas, con nombres difíciles de pronunciar y catálogos repletos de accesorios económicos. DUZSKJ, CXWXC, LYCAON, GEWAGE o CHUMXINY son solo algunos ejemplos de un ecosistema creciente que convive con firmas consolidadas y que, en muchos casos, domina las búsquedas de componentes y equipamiento básico.
Estas enseñas suelen compartir un mismo origen: fabricantes chinos que comercializan directamente a través de Amazon, reduciendo intermediarios y compitiendo con precios agresivos. Su presencia se ha multiplicado a medida que la plataforma ha impulsado sus programas logísticos y ha permitido a miles de vendedores internacionales operar con tiempos de entrega rápidos y costes ajustados.
Un modelo de negocio que prioriza volumen y visibilidad
La estrategia es clara: ofrecer productos sencillos, baratos y con un nivel de calidad pensado para un uso recreativo. Pedales, herramientas de mantenimiento, manillares, soportes para teléfono, potencias, luces o sillines figuran entre los artículos más habituales de estas marcas. La variedad es amplia y, en ocasiones, idéntica entre nombres distintos debido a que muchos de ellos proceden del mismo fabricante original (OEM).
El naming responde a otra lógica. Son siglas aleatorias o combinaciones de letras pensadas para ser únicas en Amazon y evitar conflictos de propiedad intelectual, pero también para posicionarse por encima de marcas rivales en búsquedas internas. En algunos casos derivan de transliteraciones del chino; en otros, simplemente se generan de forma automática.
Este escenario no es exclusivo del ciclismo, aunque en este sector resulta especialmente visible por el alto volumen de accesorios y la baja barrera de entrada para nuevos vendedores. El comportamiento del usuario medio de Amazon (busca un producto económico, bien valorado y con entrega rápida) favorece el auge de este tipo de enseñas.
Los ciclistas que buscan equipamiento avanzado o componentes para competición continúan acudiendo a fabricantes reconocidos, pero una parte creciente del mercado recreativo opta por estas alternativas de bajo coste. Las reseñas juegan un papel clave, ya que son el principal aval ante la ausencia de reputación de marca.
Para las empresas tradicionales, esta presencia masiva supone un reto: competir en precio es inviable, y la diferenciación pasa por reforzar la calidad, el servicio posventa y la innovación. Para el consumidor, el escenario es mixto: hay productos funcionales a precios muy bajos, pero también artículos con durabilidad muy limitada o sin un control de calidad consistente (e incluso inexistente).
El fenómeno, por tanto, ha llegado para quedarse. Mientras Amazon mantenga un ecosistema favorable a vendedores internacionales y el usuario priorice el precio por encima de la marca, nombres como DUZSKJ o CXWXC seguirán ocupando los primeros puestos en las búsquedas de accesorios ciclistas.