No hace falta ser ningún ciclista superdotado para saber que cambiar de forma correcta permite rodar con más suavidad y velocidad y, además, es mucho más divertido. Cuando se cambia de marcha en una bici de carretera, se maneja el cambio trasero y el desviador de la bici que, a su vez, mueven la cadena de una marcha a otra a través de la transmisión, todo ello con unas manetas integradas que combinan manetas de cambio y de freno. ¿Cómo se utilizan?
En una bici de carretera, la maneta izquierda controla el desviador delantero, que se encarga de mover la cadena entre los platos. Los cambios de plato son más evidentes en cada pedalada y ayudan en las subidas y las bajadas. Presionando la maneta izquierda totalmente hacia adentro, el desviador desplaza la cadena hasta el plato más grande, es decir, a una marcha más dura. Si se presiona únicamente la maneta interior pequeña hacia adentro, la cadena se desplaza hasta el plato más pequeño, es decir, a una marcha más suave.
La maneta de cambio derecha controla el cambio trasero que, a su vez, se encarga de desplazar la cadena entre los piñones del cassette. En un cassette, los piñones más pequeños son, en realidad, los más duros y rápidos y los piñones más grandes son más fáciles y lentos. Esto significa que los mismos movimientos realizados con la mano izquierda tienen el efecto contrario que los realizados con la mano derecha.
Presionando la maneta derecha totalmente hacia adentro, el cambio trasero desplaza la cadena hasta un piñón más grande, es decir, una marcha más suave pero más lenta. Si se presiona la maneta interior más pequeña hacia adentro, la cadena se desplaza hasta un piñón más pequeño, una marcha más dura pero más rápida.
Es importante evitar combinar el piñón más grande del cassette con el plato más grande y el piñón más pequeño con el plato más pequeño. Esto se denomina cruce de cadena, ya que la cadena se desplaza en ángulo y no en una línea más o menos recta. El cruce de cadena genera mucha tensión sobre la cadena y suele provocar que esta roce con el desviador. Esto produce un ruido muy molesto y puede dañar el cambio.