La Copa del Mundo de Descenso de 2019 tuvo en la mítica sede escocesa de Fort William su segunda parada, completamente épica debido al mal tiempo reinante en el lugar. Un trazado embarrado que propició múltiples caídas, abandonos e incluso alguna que otra lesión fue la nota predominante de un fin de semana en el que Amaury Pierron en hombres y Rachel Atherton en féminas lograron superar todas las adversidades para llevarse una más que merecida victoria.
