La pista de descenso de Champéry volvió a ser escenario de una de las competiciones más intensas del ciclismo de montaña. Este domingo 7 de septiembre, la austriaca Valentina Höll conquistó su cuarto maillot arcoíris consecutivo en la categoría élite femenina, mientras que el canadiense Jackson Goldstone estrenó su palmarés con un triunfo que lo consagra como nuevo referente de la disciplina.
Una jornada memorable en el Campeonato del Mundo de Descenso
La prueba femenina estuvo marcada por el regreso al máximo nivel de Myriam Nicole. La francesa marcó un registro de referencia que superaba en varios segundos a las rivales anteriores, obligando a las favoritas a dar lo mejor de sí. Marine Cabirou llegó a situarse en segunda posición, lo que dejaba a Höll como la última en tomar la salida con la presión de batir un tiempo muy exigente.

La austriaca, que no ganaba desde el Mundial de 2024 en Pal Arinsal, recuperó sensaciones justo en el momento clave. Con una primera parte de recorrido impecable, tomó ventaja suficiente para resistir en los últimos tramos y firmar la victoria por apenas 0,667 segundos. A sus 24 años, Höll revalida la hegemonía que mantiene desde 2022 y suma el tercer oro para Austria en este Campeonato del Mundo tras los éxitos de Anna Spielmann y Rosa Zierl.
En la categoría masculina, el joven alemán Henri Kiefer sorprendió a todos con una bajada rapidísima que lo mantuvo en cabeza durante gran parte de la final. Sus aspiraciones se mantuvieron intactas hasta que Goldstone, actual líder de la Copa del Mundo, ejecutó una bajada perfecta que le permitió superar al germano por casi dos segundos. Ni el vigente campeón Loris Vergier ni el pentacampeón Loïc Bruni pudieron con el canadiense, que estrenó su primer oro en la élite con tan solo 21 años.

Goldstone dedicó su victoria a Stevie Smith, mito del descenso canadiense fallecido en 2016, en un gesto que emocionó al público presente en Champéry. Con este triunfo, confirma el gran estado de forma que viene mostrando durante toda la temporada y se consolida como la gran figura emergente de la disciplina.