La segunda semana del Campeonato Mundial de Mountain Bike 2025 de la UCI, que se disputa en el Valais suizo, concentrará toda la atención en las pruebas de Cross Country. Entre Zermatt y Crans-Montana se decidirán once títulos mundiales que marcarán la historia de las disciplina de XCO, XCC y XCR.

Una semana decisiva con once maillots arcoíris en juego
El programa arranca el 9 de septiembre en Zermatt con las pruebas de Cross Country en pista corta (XCC). Allí, bajo la silueta del Matterhorn, se celebrarán las cuatro carreras que abrirán el espectáculo. El circuito, de apenas un kilómetro con 70 metros de ascenso por vuelta, promete un espectáculo explosivo con subidas intensas y un jardín de rocas que premiará la técnica y la potencia.
En categoría sub23, todas las miradas estarán puestas en el suizo Finn Treudler, gran dominador de la Copa del Mundo de Short Track, y en la canadiense Ella MacPhee, que compartirá protagonismo con Katharina Sadnik (Austria) y la local Elina Benoit.
La jornada ofrecerá también el duelo en la élite femenina entre la campeona del mundo Evie Richards, la neerlandesa Puck Pieterse, la sueca Jenny Rissveds y las suizas Alessandra Keller y Nicole Koller. En la élite masculina, Victor Koretzky intentará defender el maillot arcoíris frente a Christopher Blevins, Charlie Aldridge o los suizos Colombo, Püntener y Lillo.
Dos días más tarde, el 11 de septiembre, la acción se trasladará a Crans-Montana para el relevo mixto por equipos (XCR). Esta modalidad, con seis corredores por nación de diferentes categorías, es una de las más estratégicas y espectaculares. Estados Unidos, actuales campeones, tratarán de revalidar un título que en 2024 conquistaron por apenas tres segundos sobre Francia. Italia, bronce el pasado año, y la potente selección suiza, aspiran a destronarles con la ventaja de competir en casa.
El fin de semana quedará reservado para el Cross Country Olímpico (XCO), la modalidad reina. El viernes 12 de septiembre se disputarán las pruebas júnior, el sábado llegará el turno para los sub23 y el domingo será el plato fuerte con las categorías élite. Los ciclistas afrontarán un recorrido de 3,5 km con 190 metros de desnivel por vuelta, un trazado que exigirá resistencia, técnica y concentración absoluta.
En sub23, Treudler sueña con un doblete histórico en Zermatt y Crans-Montana, mientras que la italiana Valentina Corvi parte como favorita tras imponerse en varias rondas de la Copa del Mundo de XCO. En la élite femenina, Samara Maxwell, Rissveds y Pieterse se presentan como principales aspirantes, aunque el factor local podría impulsar a Keller y a Jolanda Neff hacia la gloria.
La prueba élite masculina será uno de los grandes atractivos del campeonato. Nino Schurter, diez veces campeón del mundo, afronta una de sus últimas carreras antes de la retirada, arropado por un público que siempre le ha idolatrado. Christopher Blevins llega como líder de la Copa del Mundo, pero tendrá que vigilar de cerca a Martín Vidaurre, Luca Martin, Victor Koretzky, Alan Hatherly y el italiano Luca Braidot. También se espera un papel destacado del suizo Mathias Flückiger, varias veces medallista, y de Lars Forster, que contará con el aliento de la afición local.
El regreso de Mathieu Van der Poel al Mundial de XCO añade un aliciente extra. El neerlandés, que ya sabe lo que es subir al podio en Lenzerheide, buscará por fin el oro que le falta en su palmarés. A sus 30 años, llega con la experiencia de haber competido al máximo nivel en distintas disciplinas, pero con la deuda pendiente de coronarse en un Mundial de Mountain Bike.