Specialized ha hecho oficial una de las colaboraciones más (in)esperadas en el mundo del ciclismo de montaña: a partir de la temporada 2025, los ciclistas del equipo Specialized Gravity montarán sistemas de freno desarrollados por Brembo, el gigante italiano reconocido por sus productos en el sector del automovilismo y motociclismo.
¿Verán los aficionados estos frenos en sus bicicletas?
Tras semanas de rumores motivados por la presencia de frenos sin marca en la bicicleta de Loic Bruni, ambas marcas confirman una alianza centrada en el desarrollo de prototipos diseñados específicamente para afrontar los retos de la Copa del Mundo de Descenso.
Esta no es la primera vez que Brembo se asoma al mundo del Mountain Bike, ya que en 2006 protagonizó una incursión previa que pasó relativamente desapercibida. Sin embargo, la situación actual es diferente: las bicicletas evolucionan a pasos agigantados, las velocidades aumentan y los recorridos exigen un rendimiento extremo en todos los componentes. La experiencia de Brembo en la Fórmula 1, MotoGP y Superbikes supone un salto de calidad en la búsqueda de sistemas de frenado capaces de responder en condiciones límite.
La nueva alianza se dirige de forma exclusiva al entorno competitivo y a la evolución tecnológica de los sistemas de freno para descenso. Según Specialized, los frenos desarrollados por Brembo son prototipos que buscan ofrecer un rendimiento superior en situaciones reales de carrera, donde la exigencia y la presión por obtener resultados no admiten concesiones.
Armin Landgraf, director ejecutivo de Specialized, ha subrayado la importancia de utilizar la competición como laboratorio de pruebas para la innovación. Para la firma californiana, contar con un socio de la talla de Brembo representa una inversión estratégica que refuerza su compromiso con la excelencia tecnológica y el apoyo a sus atletas en la élite mundial.
Por parte de Brembo, la entrada en la máxima categoría del descenso profesional es un reto apasionante, especialmente coincidiendo con su 50 aniversario en el automovilismo. Andrea Paganessi, responsable de operaciones globales, destaca el potencial de esta colaboración para establecer nuevos estándares en la frenada de bicicletas, gracias a los avances tecnológicos acumulados durante décadas en la alta competición.
Por el momento, Specialized y Brembo han dejado claro que el proyecto está centrado en las necesidades de los ciclistas profesionales y en el desarrollo de producto. No hay confirmación sobre una posible llegada al mercado de consumo, aunque la tradición de Specialized de trasladar los avances de la competición a sus modelos comerciales alimenta la expectación.