Todos hemos escuchado alguna vez aquella frase típica que dice que "una manzana al día del médico te quitaría". Es una frase que hace alusión a las valiosas propiedades de esta fruta que al parecer, es mejor comerla sin pelar, ya que el secreto de los beneficios de la manzana está en su piel.
Además del aporte extra de fibra que obtenemos si comemos la manzana con piel, conseguimos también una dosis muy recomendable de polifenoles, que son compuestos con efectos antioxidantes en nuestro organismo, y pueden ayudar a proteger contra el cáncer y enfermedades del corazón.
La creencia común es que comer la manzana con piel era más beneficioso debido a la mayor cantidad de fibra de la piel, pero recientemente se sabe que el secreto de los beneficios de la manzana está en su piel debido a que es la parte de la fruta más rica en polifenoles y por ello, más beneficiosa para nuestro organismo debido a sus efectos antioxidantes y regenerativos.
La manzana, gracias a su tamaño, forma y peso ligero, es un alimento ideal para acompañar nuestras salidas en bicicleta. Ya que sabemos que en la piel de la manzana están los mayores beneficios, es ideal consumirla bien lavada y sin pelar. Para ello, una vez lavada y limpia, podemos envolverla en papel de aluminio o similar, y guardarla en la mochila que utilizamos habitualmente para nuestras salidas en Mountain Bike. Será un buen snack para comer de forma rápida e incluso sin necesidad de bajar de la bicicleta.
Y recuerda: una manzana con piel al día, del médico te quitaría.
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