El año 2020 ha puesto a prueba los pilares sobre los que se asienta el bienestar de los empleados de Trek. La llegada de la pandemia, el teletrabajo, los cierres temporales de las tiendas de bicicletas, los procedimientos de seguridad para evitar los contagios, los confinamientos y, por último, la llegada del bike-boom, donde la bicicleta se ha puesto a la cabeza de los artículos más deseados por la sociedad, han hecho del pasado año un complejo reto que superar.
Por si esto fuera poco, desde el pasado verano la filial de Trek en Iberia asumía la gestión del mercado francés convirtiéndose en la enseña Trek South West Europe (Trek SWE). Asimismo el año terminaría con la apertura de dos nuevas tiendas de gestión propia, en Alicante y Manresa, por lo que la plantilla se duplicó ampliamente en un escenario donde las reuniones físicas no han sido posibles.
Trek es un claro ejemplo de que la unión de los diferentes equipos, bajo una fuerte cultura empresarial basada en el bienestar de los empleados, puede hacer que los momentos más difíciles sean aquellos donde más se puede destacar. Tal es así que el pasado mes de enero Trek SWE recibió, por segundo año consecutivo, el certificado Great Place to Work que reconoce a la multinacional americana en su sede en España como un excelente lugar para trabajar.
Great Place to Work es una consultoría internacional que ayuda a las organizaciones a identificar, crear y mantener excelentes lugares de trabajo a través del desarrollo de culturas de alta confianza y alto rendimiento. Con más de 30 años de experiencia, el estudio de la Certificación, elaborado por Great Place to Work, es uno de los más prestigiosos a nivel internacional. Tiene como objetivo catalogar los entornos de trabajo mediante una metodología en la que, además de realizar una auditoría al departamento de Recursos Humanos sobre sistemas de gestión, políticas y prácticas, consulta a los empleados sobre aspectos del trabajo, ambiente y relaciones en el entorno laboral.
