Scott presenta en sociedad la nueva Addict 2026, un modelo orientado hacia el ciclista que busca comodidad y versatilidad en sus rutas, sin dejar de lado la eficiencia propia de una máquina de alto nivel. Con mejoras en la absorción, paso de rueda más amplio y un planteamiento práctico en sus detalles, la Addict se convierte en una opción atractiva para los que disfrutan de largas jornadas sobre el asfalto.

Una bicicleta pensada para acumular kilómetros sin renunciar al rendimiento
El rediseño del cuadro ha sido clave para alcanzar un aumento del 50% en confort respecto a la generación anterior. El tubo de sillín más delgado en la unión con los tirantes, el refinamiento del tubo superior y la disposición de tirantes caídos aportan una absorción notable de vibraciones, lo que se traduce en un pedaleo más suave incluso en firmes irregulares.

Otro aspecto destacado es la capacidad para montar neumáticos de hasta 38 mm. Esta mejora abre la puerta a rodar con presiones más bajas, aumentando la estabilidad y la seguridad en curvas, al tiempo que se reduce la resistencia en largas distancias. Una característica que aporta confianza en rutas de fondo y aventuras cicloturistas.

La geometría también ha sido revisada con el objetivo de lograr una posición más natural y menos exigente. Un stack más alto y un reach más corto permiten mantener la comodidad sin perder eficiencia en la transferencia de potencia. Además, las vainas más cortas refuerzan la agilidad, manteniendo un equilibrio entre confort y dinamismo.

La nueva Addict se ofrece en dos niveles de construcción de carbono. La versión en HMF, con un cuadro de 850 gramos, garantiza un rendimiento equilibrado entre ligereza, rigidez y absorción. La gama en HMX, con 780 gramos, recurre a fibras de módulo superior para alcanzar un nivel más elevado de ligereza y respuesta, pensado para ciclistas exigentes.

Uno de los puntos más innovadores es el almacenamiento integrado. El cuadro incorpora un kit de reparación oculto en el tubo diagonal, lo que evita la necesidad de cargar con herramientas en los bolsillos. Además, la bicicleta ofrece anclajes discretos para instalar una bolsa frontal Syncros diseñada específicamente para la Addict, con acceso rápido y un ajuste limpio que no rompe la estética del conjunto.

La integración se ha cuidado en todos los detalles: potencia específica, cockpit heredado de la Addict RC, espaciadores y tapas de diseño refinado, así como una tija en forma de D con opción de integrar una luz trasera Syncros. La abrazadera de tija también es interna, contribuyendo a un acabado libre de cables y aerodinámico.

Pensando en la facilidad de uso, la tornillería del cuadro y de los principales componentes se ha unificado, lo que permite realizar la mayoría de ajustes con una sola herramienta. El propio cockpit esconde una llave T25 que ofrece una solución rápida para regular potencia, manillar, sillín, tija o portabidones en cualquier momento.

La gama 2026 incluye seis modelos, con precios que parten desde los 2.699 € para la Addict 50 hasta los 7.799 € de la versión Premium en carbono HMX. Todos ellos comparten la misma base tecnológica y filosofía de diseño, lo que garantiza acceso a la innovación independientemente del nivel de inversión.