La calidad es el sello distintivo de PRO, la marca de componentes de Shimano, donde cada producto es sometido a rigurosas pruebas que superan los estándares de la industria. En el ámbito del ciclismo de gravel, los componentes generalmente se prueban bajo estándares de carretera, una práctica que PRO considera insuficiente dada la creciente exigencia y tecnicidad de esta disciplina.
A medida que el ciclismo de gravel evoluciona y se vuelve más extremo, los ciclistas adoptan rutas técnicas a mayores velocidades y con una conducción más agresiva. Esto requiere que el equipo esté a la altura, garantizando la seguridad del ciclista a través de pruebas rigurosas y exigentes.
La durabilidad y fiabilidad de estos componentes aseguran que los ciclistas puedan confiar en sus equipos independientemente de las condiciones de la aventura. Los manillares, potencias, tijas de sillín y accesorios de PRO están diseñados para acompañar a los ciclistas en todo momento, permitiéndoles concentrarse en el camino por delante.
El estándar de pruebas para componentes de gravel de PRO
En la industria del ciclismo, las pruebas de fatiga determinan la rigidez y resistencia de los materiales bajo cargas repetidas. Para que un producto supere estas pruebas, debe resistir un número mínimo de ciclos de carga con una fuerza específica, medida en newtons.
Durante la fase 1 de estas pruebas, se aplica una carga en direcciones opuestas durante 100.000 ciclos, simulando el esfuerzo ejercido sobre el manillar al esprintar o levantarse del sillín. Los manillares de carretera deben soportar una fuerza mínima de 280 newtons en esta fase. En la fase 2, la carga se aplica en la misma dirección durante 100.000 ciclos, imitando el terreno accidentado de la bicicleta de montaña, con una fuerza de 450 newtons.
El estándar PRO Gravel utiliza los valores más altos de las pruebas de carretera y MTB, añadiendo un margen de seguridad adicional: los componentes de aleación se prueban a un 110% de la carga estándar, y los de carbono a un 125%. Para la fase 1, esto significa que los componentes de aleación deben resistir 308 newtons y los de carbono 350 newtons. En la fase 2, los componentes deben soportar 495 newtons para aleación y 562,5 newtons para carbono.
El manillar PRO Discover Aero Carbon es el primer producto en ser probado bajo estas nuevas normas. Su éxito en estas pruebas proporciona una mayor tranquilidad a los ciclistas sobre su calidad y resistencia. Asimismo, la potencia PRO Discover 10 fue evaluada en combinación con el manillar, siguiendo los estándares tanto de carretera como de MTB.
Los ciclistas que opten por el nuevo manillar y potencia para bicis de gravel pueden confiar en que estos productos no solo mejorarán su experiencia de conducción desde el punto de vista estético y aerodinámico, sino que también les ofrecerán la seguridad necesaria. Además, vale la pena recordar que los productos PRO vienen con una garantía de por vida, basada en una vida útil estimada de 10 años.