El invierno no tiene por qué frenar las ganas de montar en bicicleta. Con la ropa adecuada, las rutas bajo bajas temperaturas pueden convertirse en experiencias igual de satisfactorias que en verano. El secreto está en elegir prendas técnicas diseñadas para mantener el calor, permitir la transpiración y proteger del viento y la humedad. Estas son las cinco piezas que todo ciclista debería tener en su armario cuando llega el frío.
Equipamiento esencial para pedalear con frío sin perder confort ni rendimiento
La chaqueta térmica es la pieza más importante del equipamiento invernal. Su función es mantener estable la temperatura corporal, evitando que el aire helado penetre y que el sudor se acumule. Los modelos más avanzados combinan materiales aislantes con tejidos cortavientos y, en algunos casos, tratamientos repelentes al agua que resultan especialmente útiles bajo lluvia ligera. Ejemplos como la Gorewear Gore-Tex Paclite o la Van Rysel RCR-R Pro Ultralight Rain destacan por su equilibrio entre ligereza y protección.
- Chaqueta Van Rysel RCR-R Pro Ultralight Rain (Ver en Decathlon).
- Chaqueta Van Rysel Racer 2 (Ver en Decathlon).
- Chaqueta Van Rysel Endurance (Ver en Decathlon).
- Chaqueta Gorewear Gore-Tex Paclite (Ver en Amazon).
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El culotte térmico largo completa la defensa del cuerpo. Fabricado con tejidos como el forro polar o materiales con tratamiento impermeable, mantiene las piernas calientes y facilita la libertad de movimiento durante el pedaleo. Opciones como los modelos de Siroko, Van Rysel o Gorewear aseguran un ajuste ergonómico y costuras planas que evitan rozaduras, algo fundamental en rutas de larga duración.
- Culotte largo Gorewear C3 Thermo (Ver en Amazon).
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- Culotte largo Gorewear C5 Thermo (Ver en Amazon).
- Culotte largo Van Rysel RCR Extreme (Ver en Decathlon).
- Culotte largo Rockrider MTB XC (Ver en Decathlon).
Las manos son especialmente sensibles al frío, por lo que unos guantes de invierno son indispensables. Más allá del aislamiento térmico, deben garantizar un agarre firme y conservar la sensibilidad sobre el manillar y los frenos. Los modelos con membrana cortavientos o impermeable, como los Gorewear C5 o los Van Rysel RoadR 900, son una apuesta segura. Además, la compatibilidad con pantallas táctiles es un detalle muy práctico en la era de los ciclocomputadores y smartphones.
- Guantes Giro Xnetic H2O (Ver en Decathlon).
- Guantes Giro Proof (Ver en Decathlon).
- Guantes Rockrider MTB Race (Ver en Decathlon).
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- Guantes Gorewear Gore-Tex Infinium (Ver en Amazon).
Los cubrebotas impermeables protegen los pies del agua y del viento, zonas especialmente expuestas durante las salidas invernales. Suelen fabricarse en neopreno o tejidos técnicos como Gore-Tex, que garantizan una barrera eficaz sin comprometer la movilidad del tobillo. Marcas como GripGrab, RockBros o Van Rysel ofrecen modelos ligeros y resistentes para mantener el confort incluso en jornadas húmedas o con barro.
- Cubrebotas Gorewear Shield Thermo (Ver en Amazon).
- Cubrebotas RockBros Polar (Ver en Amazon).
- Cubrebotas GripGrab Arctic X (Ver en Amazon).
- Cubrebotas Giro Proof 2.0 Winter (Ver en Decathlon).
- Cubrebotas Van Rysel RoadR 500 (Ver en Decathlon).
Por último, la braga térmica o buff es un complemento pequeño pero imprescindible. Protege cuello, boca y orejas del aire helado y puede usarse de múltiples formas según la intensidad del frío. Los modelos de lana merina o tejidos técnicos transpirables, como los de Buff o Van Rysel, son los preferidos por su versatilidad y ligereza.
- Braga cortavientos Van Rysel 900 (Ver en Decathlon).
- Braga térmica Van Rysel 500 (Ver en Decathlon).
- Braga térmica Van Rysel 100 (Ver en Decathlon).
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Equiparse correctamente no solo mejora la comodidad, sino también la seguridad. Un ciclista bien protegido mantiene mejor la concentración, reacciona con más precisión y disfruta plenamente de sus salidas invernales, incluso cuando el termómetro baja de forma drástica.