La Ravemen FR500 se presenta como una de las soluciones más completas para ciclistas urbanos y de carretera. Esta luz delantera no solo garantiza visibilidad en todo momento, también actúa como soporte integrado para ciclocomputadores Garmin, Wahoo y Bryton, optimizando el espacio en el manillar y ofreciendo un montaje más limpio y seguro.

Seguridad, visibilidad y practicidad en un solo dispositivo
Con una potencia de 500 lúmenes y un ángulo de iluminación de 270°, el dispositivo asegura que el ciclista sea visto tanto de frente como desde los laterales. Dispone de seis modos de uso, incluidos tres de destello diurno diseñados para captar la atención incluso bajo un sol intenso. Por la noche, su haz estable permite circular con confianza en zonas oscuras, ya sea en recorridos urbanos o en carreteras secundarias.

Uno de los aspectos más prácticos es su integración con los ciclocomputadores. La FR500 permite instalar el dispositivo GPS directamente sobre la luz, lo que evita añadir soportes adicionales. Para los usuarios de Garmin y Wahoo se incluyen adaptadores, en el caso de Bryton con el accesorio específico QTM04, disponible por separado.

El sistema de encendido y apagado automático añade comodidad al día a día: tras dos minutos de inactividad, la luz se apaga y vuelve a activarse al detectar movimiento. Además, puede cargarse mediante USB-C incluso en uso, lo que resulta útil en rutas largas o salidas nocturnas.

En cuanto a resistencia, la FR500 cuenta con certificación IPX6, lo que le permite soportar lluvias intensas sin pérdida de rendimiento. Su cuerpo de aleación de aluminio y el diseño con seis ranuras de ventilación favorecen la disipación del calor, evitando caídas de intensidad en usos prolongados.

Disponible en la tienda oficial de Ravemen en Amazon, la FR500 tiene un precio recomendado de 64,95 €, aunque en oferta puede adquirirse por 61,70 € con envío incluido. Una opción muy interesante para ciclistas que buscan seguridad, eficiencia y un cockpit más ordenado.