En este año pandémico, los rodillos de entrenamiento se han convertido en uno de los accesorios más buscados por todos los amantes del ciclismo. Gracias a ellos, los ciclistas han podido seguir entrenando a pesar de las restricciones de movilidad que han impuesto muchos gobiernos para frenar los contagios de la Covid-19, por no mencionar que también son muy prácticos cuando el invierno acecha y la lluvia, la nieve o el viento impiden salir a practicar deporte.

El nuevo Tacx Boost se presenta como una nueva opción para todos aquellos usuarios que buscan un rodillo de entrenamiento económico, silencioso y potente. Cuenta con una potencia máxima de 1050W y 10 niveles de resistencia, además de conectividad ANT+ para vincular sensores, freno magnético para no tenerlo enchufado a una fuente de alimentación externa e integración con la plataforma Garmin Connect.

Este nuevo rodillo es muy fácil de poner en marcha con un par de sencillas operaciones e incluye un soporte multifunción para la rueda delantera que no solo garantiza una postura natural en la bicicleta, sino que también puede usarse como asa para transportar el rodillo. Respecto a sus dimensiones, tiene un tamaño de 675x650 mm desplegado y de 565x410x245 mm plegado, con un peso declarado de 8.5 Kg.
El Tacx Boost es compatible con todo tipo de bicicletas y, vinculado a un sensor de velocidad, puede cuantificar la velocidad, la distancia y la potencia virtual mientras se utilizan plataformas de entrenamiento como Tacx Training, Zwift o TrainerRoad. El rodillo está disponible en un pack básico (249,99€) que incluye rodillo, soporte para la rueda delantera y cierre rápido para la rueda trasera; y en un pack más completo (279,99€) que incluye además el sensor de velocidad.