Cualquier ciclista de montaña con cierta experiencia sabe muy bien que, sobre terrenos secos, desnivelados y pedregosos, el más mínimo descuido puede suponer una caída. Si a ésto le sumamos un acantilado justo en el margen del sendero y una cámara de acción, los pelos de punta quedan asegurados. A continuación, Nico Tikhomiroff y Narbaix rodando en una peligrosa y espeluznante ruta de los Alpes franceses. No apto para personas con vértigo.
