Por un lado, su superdeportivo como el McLaren MP4-12C. Por otro lado, una bicicleta de Gravel como la Kross Esker. Y en medio de todo el tinglado, el biker profesional David Cachón disfrutando del asfalto y, por supuesto, de los pedales cuando la carretera se termina dando paso a rutas más propias de hacerlas andando que sobre las dos ruedas.
