La etapa de Laurie Greenland en el Santa Cruz Syndicate ha llegado a su fin. El corredor británico no formará parte de la estructura estadounidense en 2026, cerrando un ciclo de cuatro años marcado por resultados destacados, momentos de gran nivel competitivo y un fuerte peso dentro del vestuario.

Un periodo de contrastes sobre la bicicleta y fuera de ella
El anuncio llega tras un par de temporadas complicadas en lo deportivo, lejos de la regularidad que caracterizó a Greenland en etapas anteriores de su carrera. Aun así, cuando el británico encontraba ritmo, seguía siendo uno de los corredores más espectaculares del circuito, con un estilo agresivo, derrapadas constantes y una lectura del terreno muy personal que le convertían en uno de los grandes atractivos de cada manga.
Greenland aterrizó en el Santa Cruz Syndicate en 2022 y su adaptación fue inmediata. Desde su primer año aportó velocidad, experiencia y una presencia constante en los momentos clave del calendario. El balance deportivo incluye varios podios en Copa del Mundo y, como punto álgido, la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo disputado en Fort William, un resultado especialmente simbólico al lograrse en casa.
El equipo ha querido despedirle con un mensaje extenso y cargado de anécdotas que reflejan su importancia más allá de los cronos. En el comunicado, el Syndicate resume estos cuatro años con un tono cercano y directo, destacando tanto los éxitos en carrera como la convivencia diaria dentro del box.
Después de cuatro años increíblemente divertidos, es momento de decir adiós a Lozza
, arranca el texto, que subraya su capacidad para rendir bajo presión, su calma en las mañanas de carrera y su habilidad para rebajar la tensión en los momentos más exigentes del fin de semana.
El recuerdo del tercer puesto mundialista en Fort William ocupa un lugar central en la despedida. Según el equipo, incluso tras un periodo alejado de la bicicleta, Greenland mostró un nivel altísimo durante toda la semana y tuvo opciones reales de victoria, truncadas únicamente por un pequeño error en uno de los tramos decisivos del circuito.
Más allá de la competición, el comunicado repasa episodios que han contribuido a construir su figura dentro del equipo: desde entrenamientos atípicos, olvidos recurrentes del material de carrera o aventuras lejos del paddock, hasta su papel como elemento cohesionador en un grupo sometido habitualmente a una gran presión mediática y deportiva.
La relación entre Greenland y el Santa Cruz Syndicate se cierra, al menos por ahora, con un mensaje claro: Una vez corredor del Syndicate, siempre corredor del Syndicate
. El futuro del británico sigue abierto y será uno de los nombres a seguir de cara a la configuración de las parrillas de 2026, con la incógnita de si logrará recuperar la consistencia que le llevó a estar entre los mejores del mundo.