La Copa del Mundo de Ciclocross vivió en Terralba una jornada marcada por el barro, los cambios de ritmo y dos desenlaces muy distintos. En la carrera masculina, Michael Vanthourenhout aprovechó un momento preciso para resolver una disputa táctica que había mantenido a varios candidatos en la lucha por el triunfo. En la femenina, Lucinda Brand volvió a imponer una superioridad que, a estas alturas del invierno, se mide ya en cifras difíciles de igualar.
Un ataque quirúrgico decide la prueba masculina
Desde los primeros metros quedó claro que el circuito sardo iba a exigir más lectura que explosividad. Las zonas rápidas permitían cierta fluidez, pero los pasos de arena y los pasillos estrechos frenaban los intentos de ruptura. El resultado fue una carrera densa, con relevos cortos y un grupo selecto que fue filtrándose vuelta a vuelta.
Con dos giros pendientes, la cabeza se redujo a cinco nombres: Vanthourenhout, Nieuwenhuis, Sweeck, Vandeputte y Kamp. Ninguno conseguía un hueco real y cada maniobra dependía de anticipar, más que de forzar, un error ajeno. En ese escenario, el belga encontró el único resquicio disponible. En la vuelta decisiva, aprovechó una zona de barro interior para adelantar sin exponerse en exceso y colocarse al frente justo antes del tramo más determinante del circuito.

El movimiento descolocó al resto. Nieuwenhuis y Sweeck reaccionaron con rapidez, pero el espacio que Vanthourenhout abrió en apenas unos metros fue suficiente para sostener la ventaja hasta la meta. El triunfo supone su primera victoria en la Copa del Mundo este invierno y lo devuelve a la pelea por la general, donde ya figura en cuarta posición. El calendario avanza hacia Námur, escenario donde Mathieu van der Poel estrenará el maillot arcoíris y donde se espera una prueba de mayor desgaste físico.
Brand refuerza un dominio sin fisuras en la categoría femenina
La carrera femenina tuvo una lectura completamente diferente. Tras un inicio agitado, Lucinda Brand tomó el control en cuanto la trazada empezó a asentarse. Su aceleración en una zona de arena abrió el primer hueco significativo y, desde ese instante, la neerlandesa impuso una cadencia que fue minando la resistencia del grupo perseguidor.
Van Alphen, Van Anrooij, Bentveld y Casasola fueron quienes trataron de sostener la distancia en los primeros compases, pero la diferencia creció con cada vuelta. La ausencia de Ceylin del Carmen Alvarado, aún condicionada por su lesión de rodilla, dejó a Brand sin una rival directa en esfuerzos largos, un escenario que favoreció su manejo del ritmo.

El pulso por el segundo puesto entre Van Alphen y Van Anrooij animó la parte final, aunque ninguna pudo acercarse a la líder. La última vuelta confirmó una superioridad que ya empieza a adquirir dimensión estadística: Terralba es su novena victoria en once apariciones esta temporada, un registro que amplía una racha de podios consecutivos poco habitual en la élite del ciclocross moderno.
La temporada se desplaza ahora a un circuito icónico. Námur, con su mezcla de desnivel, técnica y fatiga acumulada, pondrá a prueba a los ciclistas que llegan en mejor forma y abrirá un nuevo capítulo en la lucha por la Copa del Mundo.