La Vuelta a España 2025 contará con un presupuesto total de 1.115.775 € destinados a premios. Aunque la cifra es algo inferior a la de 2024, el sistema de reparto se mantiene intacto, siendo las etapas el principal foco de ingresos para los ciclistas.

Así se distribuyen las ganancias para los corredores durante las tres semanas de competición
Un triunfo parcial en la ronda española tiene un valor de 11.000 €, mientras que el segundo clasificado percibe 5.500 € y el tercero 2.700 €. Las cantidades se reducen progresivamente hasta los 360 € reservados a los corredores que finalicen entre el décimo y el vigésimo puesto.
Además, cada día se reparten 550 € al ganador del sprint intermedio y premios que oscilan entre los 60 € y los 460 € por pasar en cabeza o en segunda posición los puertos de montaña, dependiendo de la categoría.
La tradicional Cima Alberto Fernández, asignada este año a la subida al Anglirú, otorgará 1.000 € al primer ciclista en coronarla, mientras que el premio al corredor más combativo de cada jornada está fijado en 200 €.
El uso de los maillots distintivos también conlleva incentivos económicos. Cada jornada con el maillot rojo se paga con 500 €, el verde y el de la montaña con 100 €, y el blanco de mejor joven con 70 €. A nivel colectivo, el equipo líder por escuadras recibe 400 € diarios.
En la clasificación general final, la gran recompensa es para el vencedor absoluto, que se embolsará 150.000 €. El segundo clasificado recibirá 57.985 € y el tercero 30.000 €, con premios decrecientes hasta los 3.800 € que corresponden a los corredores entre los puestos 10º y 20º.
Los maillots verde y blanco están valorados en 11.000 €, mientras que el de la montaña asciende a 13.000 €. Por su parte, el mejor equipo de la general percibirá 12.500 € y el corredor más combativo de la ronda 3.000 €.
Si bien las cantidades pueden parecer modestas al compararlas con otras disciplinas, en el ciclismo los premios mantienen una importancia especial. En muchos equipos, las ganancias se reparten en una caja común que beneficia a corredores, auxiliares y personal técnico, convirtiéndose en un incentivo colectivo más allá del palmarés deportivo.
La comparativa con otras grandes vueltas deja a la Vuelta en tercer lugar en volumen de premios: el Tour de Francia lidera con 2,3 millones de euros, el Giro de Italia se sitúa en torno a 1,6 millones, y la ronda española mantiene su identidad en torno al millón de euros, lo que refuerza su carácter más modesto pero igualmente competitivo.